El síndic de greuges, Rafael Ribó, ha clausurado la Jornada sobre Buena Administración y Administración Local organizada por la síndica de Barcelona, Pilar Malla, en el Palacio Centelles de Barcelona. En su discurso Ribó ha recordado la próxima celebración del bicentenario de la creación de la figura del Ombudsman por decisión del Rey de Suecia, que la incluyó en su Constitución.
Con esta alusión, el síndic ha recordado la importancia de la existencia del Defensor de las personas ante una mala administración, un hecho que ya se daba hace dos siglos. Según el síndic Ribó, hay que combatir la mala administración y la figura del defensor o síndic debe ser la de un auténtico auditor público, actuando con rigor a partir de la autoridad, siendo accesible a los ciudadanos y sabiendo escuchar. La institución del defensor es un colaborador de la administración, porque detecta sus problemas y le ofrece vías de solución, posibles salidas para resolver los casos que se le presentan.Un paso importante a dar, según Rafael Ribó, es perder el miedo a defender los derechos y los deberes y crear código de buena administración, una herramienta, un instrumento en el cual se está trabajando desde el Síndic de Greuges de Catalunya para que toda la red de síndics y defensores de Cataluña puedan debatir, enriquecer y utilizar.