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El Síndic constata que la segregación escolar erosiona el principio de equidad, y propone cambios en la admisión y en la oferta

15/07/2016

(c) Síndic de Greuges

El Síndic defiende un pacto social y político para combatir decididamente la segregación escolar, tras una década sin mejora significativa 

Recomienda que se elabore un nuevo decreto de admisión de alumnado que desarrolle nuevos instrumentos de planificación educativa ya previstos en la LEC

Evidencia que existen municipios que han utilizado activamente mecanismos para evitar la segregación, como la reserva de plazas, con buenos resultados, pero lamenta que en muchos otros municipios, no ha sido así

Destaca la falta de transparencia sobre las cuotas que se deben sufragar a los centros públicos y concertados

Lamenta la escasa conciencia colectiva de la necesidad de combatir la segregación y de preservar la equidad del sistema como bien común

 

El Síndic de Greuges ha presentado este viernes, 15 de julio, el informe extraordinario La segregación escolar en Cataluña (I): la gestión del proceso de admisión de alumnado, que plantea diez toques de alerta sobre los déficits y carencias que es necesario abordar para combatir este problema. El documento tiene como referencia un informe anterior sobre segregación presentado en el año 2008.

Desde aquel primer informe, la situación no ha mejorado y el desequilibrio en la composición social de los centros se mantiene en proporciones similares: dentro de un mismo barrio, continuamos teniendo escuelas con perfiles de alumnado muy diferente entre ellas, y diferentes también de la composición social del entorno. Si se toma como referencia la distribución del alumnado extranjero, se observa que los desequilibrios se han mantenido estables en la última década (tabla 1 Resumen ejecutivo).

Para afrontar esta situación, el Síndic, quien cuestiona la poca intensidad de las políticas de lucha contra la segregación escolar implementadas en la última década, propone al Departamento de Enseñanza que incorpore cambios normativos, como por ejemplo un nuevo decreto de admisión del alumnado. El objetivo es crear los mecanismos para orientar a las escuelas y a las familias en el proceso de asignación de plazas de acuerdo con una planificación equilibrada de la oferta. Entre otras medidas, recomienda que se desarrollen las proporciones máximas de alumnado con necesidades educativas específicas por centro, ya previstas en la LEC desde el año 2009 y aún pendientes de desarrollo, o que se supriman los criterios discriminatorios de acceso preferente a determinados centros como el de familiares de exalumnos.

En cuanto a las desigualdades territoriales, se dan notables diferencias entre municipios a la hora de priorizar la lucha contra la segregación escolar. El Síndic constata que la segregación del alumnado extranjero no está relacionada con el peso del hecho migratorio en los municipios, y que hay margen desde la política educativa en la gestión del proceso de admisión para reducir los desequilibrios existentes. Municipios como Manlleu, Olot, Banyoles, Mataró o Vic, para poner algunos ejemplos, poseen porcentajes elevados de alumnado extranjero y niveles comparativamente bajos de segregación de este alumnado, en parte, gracias a la implantación de medidas durante años.

Los diez municipios con más segregación en primaria son Terrassa, Cerdanyola del Vallès, Sabadell, Badalona, Tarragona, Esplugues de Llobregat, Sant Joan Despí, Girona, Lleida y Sant Adrià de Besòs, y algunos distritos de la ciudad de Barcelona como Horta-Guinardó o Sants–Montjuïc.

En este sentido, el informe sugiere que se adopten medidas activas de planificación de la oferta de plazas escolares en los municipios. Entre estas, destaca evitar las situaciones de sobreoferta antes del proceso de preinscripción, con un equilibrio entre la demanda potencial y la demanda real (solicitudes) y las plazas ofertadas por zona, aunque este hecho suponga suprimir grupos en determinados centros (sin que deban ser necesariamente centros públicos). El informe también incluye diversas propuestas en torno a la necesidad de utilizar más activamente la reserva de plazas como instrumento de escolarización equilibrada de alumnado.

El Síndic recuerda los desequilibrios entre centros públicos y concertados, con una escolarización tres veces superior del alumnado extranjero en el sector público, y con carencias de corresponsabilidad en la escolarización del alumnado socialmente desfavorecido por parte del sector concertado.

Sin embargo, es preciso poner de manifiesto los desequilibrios existentes dentro de cada sector, con escuelas públicas y concertadas más o menos comprometidas con la escolarización de alumnado socialmente desfavorecido. Estos desequilibrios se ven reforzados en el marco del proceso de admisión, especialmente a través de las puertas abiertas u otros, por el uso de discursos por parte de los propios centros orientados a atraer a un determinado perfil de alumnado, como sucede con algunas escuelas con proyectos singulares, a poner en valor las propias virtudes e implícita o explícitamente a destacar los defectos de los otros centros del entorno con una lógica competitiva, o a reforzar prejuicios sobre la supuesta calidad de una determinada tipología de centro y no de otros.

Entre los toques de atención destinados a Enseñanza, también destaca la falta de transparencia sobre las cuotas que se deben sufragar en los centros públicos y concertados y el tratamiento diferencial de la supresión de grupos en el sector público y en el sector privado.

El Síndic, además, introduce como factor a tener en cuenta la escasa conciencia colectiva de la necesidad de combatir la segregación escolar y de preservar la equidad del sistema como bien común. La libertad de elección de centro no es un derecho ilimitado, ni tiene carácter absoluto porque su aplicación incondicionada reproduce la segregación escolar y el propio ordenamiento jurídico lo condiciona a la escolarización equilibrada del alumnado. Sin perder de vista que la elección escolar de las familias también tiene una dimensión colectiva, será muy difícil combatir el fenómeno de la segregación en el marco del proceso de admisión. Por este motivo, el Síndic pide un pacto entre todas las fuerzas políticas y sociales para generar consensos sociales que hagan posible la lucha contra la segregación.

El Síndic concluye este informe con el anuncio de la próxima presentación del informe La segregación escolar en Cataluña (II): las condiciones de escolarización. Éste se centrará en analizar cómo las desigualdades en las condiciones de escolarización entre centros pueden reforzar esta segregación.

Informe La segregación escolar en Cataluña (I): la gestión del proceso de admisión de alumnado  

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