El síndic de greuges, Rafael Ribó, se ha dirigido al Departamento de Salud para hacer unas sugerencias para mejorar la atención al usuario del Instituto Catalán de Evaluaciones Médicas (ICAM). Las sugerencias hacen referencia al trato que dispensan los médicos evaluadores del ICAM y a la toma en consideración de los dictámenes que también pueda aportar el paciente.
En cuanto al trato humano que se dispensa en el ICAM, que ha sido motivo de 17 quejas durante el 2007, el Síndic recuerda al Departamento de Salud la necesidad de prestar a estas personas un trato considerado y deferente y de ofrecerles la máxima información sobre los procedimientos que les afectan, asegurando también que la información dada es comprendida.
El Síndic considera que las personas que van al ICAM, que no siempre se encuentran en óptimas condiciones físicas o anímicas, tienen derecho a que se las trate de manera respetuosa y educada, con independencia de que sus expectativas (confirmación de su incapacidad temporal o informe propuesta favorable a incapacidad permanente que se tramite) se cumplan o no. Sobre la consideración de los informes o dictámenes aportados a los médicos del ICAM, el Síndic considera, sin cuestionar en ningún momento la independencia técnica del ICAM, que se tendrían que tener en cuenta todos los informes médicos y resultados de pruebas de que se pueda disponer, tanto los que aporta el paciente como los que el ICAM haya podido pedir a sus consultores.
Muchos de los informes que aportan los pacientes son firmados por médicos especialistas en la patología que se debe valorar y es en este sentido que se les debe dar la importancia que los corresponde.
No se pretende que los médicos evaluadores del ICAM se sometan al criterio médico de los informes de otros especialistas que les aportan los pacientes, ya que eso atentaría contra su independencia y objetividad, pero sí que se tengan en cuenta, cada uno en la medida en que corresponda, como un elemento más de valoración.El Síndic valora positivamente que los médicos evaluadores del ICAM hagan formación continuada, pero insta al Departamento a reforzar esta formación para que los pacientes no tengan la percepción de que el profesional que los está evaluando desconoce aspectos de su patología que merecen ser tenidos en consideración.