El Síndic ha recibido un grupo de quejas por la falta de entrada en funcionamiento, en este curso 2011-2012, de las guarderías municipales del Ayuntamiento de Barcelona Jaén, Caspolino, y los Patufets de Navas. En septiembre se les comunicó que estas guarderías no se pondrían en funcionamiento durante este curso y que, en consecuencia, no tenían plaza asignada.
Las familias afectadas formalizaron la solicitud de preinscripción en estas escuelas en base a la información sobre oferta de plazas facilitada por el Consorcio de Educación de Barcelona y les fue asignada plaza en estos centros. No consta, en cambio, que se llevase a cabo la formalización de matrícula en las guarderías, que aún no han iniciado su actividad.
A la vista de la información recogida se pone de manifiesto un mal funcionamiento de la Administración en este caso, por haber incluido dentro del proceso de preinscripción a estas guarderías y asignar a las familias unas plazas inexistentes, ya que forman parte de centros que no han entrado aún en funcionamiento. En este caso, la oferta de estas plazas sin garantía de disponibilidad efectiva en el mes de enero incumple el deber de información a las familias que impone la normativa de preinscripción como punto de partida para llevar a cabo el proceso y, de forma más general, conculca el derecho de los ciudadanos a obtener de las administraciones una información veraz y de calidad.
Por otra parte, el hecho de que la falta de entrada en funcionamiento no se limite a un solo centro, sino que afecte a tres, y el hecho de que este retraso no sea atribuible a factores externos al Ayuntamiento de Barcelona –en ningún momento se hace constar este extremo- hacen pensar que la Administración en este supuesto no ha tenido en cuenta los principios de eficacia y eficiencia que deben regir la actuación de las administraciones.