Rafael Ribó reclama, por medio de una declaración, más recursos y medidas por parte de todos los gobiernos implicados y de la Unión Europea
Solicita directamente a las instituciones de defensa de derechos que se impliquen para aportar soluciones y prevenir tragedias futuras para acabar con las causas de la tragedia humanitaria
Apela a un esfuerzo pedagógico importante de los poderes públicos para concienciar e implicar a la población en las responsabilidades colectivas
El Síndic de Greuges de Cataluña ha puesto el acento en el derecho a la vida y a la subsistencia para concienciar a la comunidad internacional de la parte de responsabilidad que todos debemos asumir ante a la muerte de miles de personas en el Mediterráneo, en lo que supone una grave crisis humanitaria.
Rafael Ribó, en el marco de la competencia que tiene asignada en la defensa y garantía de los derechos humanos, ha puesto por escrito estas reflexiones en una declaración en la que subraya que el fenómeno migratorio existente actualmente en el sur de Europa se debe gestionar desde ambas orillas del Mediterráneo.
Según el Síndic, para evitar tragedias como la de Lampedusa, todos los gobiernos implicados y la Unión Europea deben destinar más recursos y aplicar las medidas adecuadas. También recomienda que se haga pedagogía y se sensibilice a la ciudadanía y a la opinión pública del drama que subyace detrás del fenómeno de la inmigración.
El Síndic ha enviado estas declaración al Parlamento de Cataluña y a la Generalitat de Cataluña, al comisario europeo de derechos humanos, Nils Muiznieks, a la defensora del pueblo europeo, Emily O'Reilly, a las redes internacionales de ombudman, como el Instituto Internacional del Ombudsman (IOI), a la AOM (Asociación de Ombudsman del Mediterráneo) y a la ENOC (Red de defensores europeos para la infancia) y les ha propuesto la organización de una iniciativa internacional para abordar la problemática y aportar soluciones.