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El Síndic propone que la educación infantil de 0 a 3 años sea un instrumento realmente eficaz para combatir las desigualdades sociales
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Presentación del informe La igualdad de oportunidades en la educación infantil 0-3 años
Tras años de políticas públicas de creación de plazas de guardería, es necesario centrar los esfuerzos en la mejora de la equidad en las condiciones de acceso.
A causa de las desigualdades estructurales de acceso, las guarderías tienen actualmente un papel más orientado a atender las necesidades de conciliación de las familias que a garantizar la igualdad de oportunidades en la educación.
En los últimos años, por efecto de la crisis económica, las dificultades presupuestarias y los incrementos de las cuotas, hay menos garantías de equidad en el acceso a las guarderías.
El Síndic de Greuges ha presentado en el Parlamento el informe La igualdad de oportunidades en la educación infantil (0 a 3 años). Concebido a partir del seguimiento y la actualización del Informe extraordinario sobre la escolarización de 0 a 3 años, del año 2007, el documento entregado hoy plantea el reto de convertir esta primera etapa educativa en un instrumento eficaz para combatir las desigualdades sociales.
Con este objetivo, el Síndic recomienda al Departamento de Enseñanza, a las diputaciones y a los ayuntamientos que elabore un nuevo modelo de financiación que garantice el acceso a la primera educación de todos los niños en igualdad de oportunidades. (Continua en la nota íntegra)
PRINCIPALES RECOMENDACIONES
La financiación de la educación infantil de primer ciclo condicionada a las características socioeconómicas del alumnado y de los entornos sociales de los centros
- El Departamento de Enseñanza debe recuperar la inversión en la educación infantil de primer ciclo y establecer las bases, conjuntamente con las diputaciones y las entidades municipalistas, de un nuevo modelo de financiación de esta etapa educativa que garantice la inversión pública y los sistemas de subvención y ayuda a la educación infantil de primer ciclo necesarios para hacer posible el mantenimiento y la consolidación de la oferta de guarderías, y el acceso de cualquier niño en condiciones de igualdad de oportunidades.
- La subvención para el funcionamiento de los jardines de infancia públicos y privados no debería ser lineal con un importe definido por alumno/curso, igual para todas las escuelas y municipios, sino condicionada a la realidad social del entorno donde se ubica el centro. La financiación se deben destinar “preferentemente para satisfacer las necesidades de escolarización de niños en entornos socioeconómicos o culturales desfavorecidos y en zonas rurales”, tal como establece el artículo 198.2 de la LEC.
Las medidas de accesibilidad económica
- El Departamento de Enseñanza debería restituir la convocatoria anual de subvención a los ayuntamientos para la escolarización de niños de 0 a 3 años que se encuentren en situaciones socioeconómicas desfavorecidas que había estado otorgando hasta el curso 2010/2011, y los ayuntamientos deberían disponer, también con fondos propios, de un sistema de ayudas (becas, bonificaciones y exenciones, etc.) que promueva el acceso en igualdad de oportunidades a la oferta de guarderías y jardines de infancia públicos del alumnado de educación infantil de primer ciclo socialmente desfavorecido.
- Los ayuntamientos deben establecer otros sistemas de pago, como la tarifación social, para garantizar el acceso de cualquier niño en igualdad de oportunidades a las guarderías municipales y que el nivel de copago, especialmente si se incrementa, esté condicionado por el nivel de renta de las familias.
La provisión territorial de oferta en entornos sociales desfavorecidos
- El Departamento de Enseñanza, las diputaciones catalanas y los ayuntamientos deben adoptar medidas para garantizar y promover la existencia de guarderías públicas en los entornos sociales menos favorecidos (y completar la creación de oferta pública con otras medidas relacionadas con la mejora de la accesibilidad económica a la oferta y con la estimulación de la demanda). El objetivo debe ser equiparar a la media catalana las tasas de escolarización de los municipios con una composición social menos favorecida.
El aprovechamiento de los criterios de admisión de alumnado en la educación infantil de primer ciclo para fomentar la igualdad de oportunidades
De acuerdo con la discrecionalidad de que disponen, los ayuntamientos deberían regular un criterio de renta más comprensivo, no limitado a las situaciones de percepción de la renta mínima de inserción, y eliminar otros criterios establecidos que directa o indirectamente pueden perjudicar el acceso del alumnado socialmente más desfavorecido (años de empadronamiento, situación de ocupación por parte de los progenitores, etc.).
