Sugiere que los protocolos, los impresos y los tratamientos vinculados a estas técnicas se adecuen a su realidad
Es necesaria la regulación de este derecho para evitar discriminación en la atención sanitari
Las afectadas denuncian que el hecho de que el acceso se fundamente en la infertilidad excluye de facto a las mujeres solas y a las lesbianas fértiles
El Síndic ha solicitado al Departamento de Salud que dé cumplimiento a la Ley de garantías de las personas LGTBI y regule el derecho de las mujeres lesbianas a acceder a las técnicas de reproducción humana asistida (RHA) con cargo a la sanidad pública.
Rafael Ribó, quien tiene el mandato del Parlamento de supervisar la actuación de la administración con relación a la ley citada, investigó este agravio tras recibir una queja de la asociación "Ca la dona". El escrito, del pasado mes de mayo, denunciaba una vulneración de derechos fundamentales y de discriminación en el acceso a estos tratamientos.
La queja también planteaba que en algunas ocasiones y en algunos centros públicos, las mujeres lesbianas pueden acceder a esta prestación con cargo a la sanidad pública. En estos supuestos, sin embargo, se encuentran con que los formularios que deben cumplimentar hacen referencia a datos en clave heterosexual, los protocolos aplicables valoran criterios médicos que no se adecuan a su realidad y el tratamiento a que deben someterse es excesivamente medicalizado e innecesario en muchos casos. Ello comporta, además, una discriminación entre estas mujeres y las que pertenecen a zonas sanitarias donde el acceso no es posible.
Respecto a esta situación, el Síndic ha recomendado que los protocolos, los impresos y los tratamientos vinculados a estas técnicas se adecuen a la realidad de las mujeres lesbianas. En esta misma línea, el Síndic ha sugerido que desde el Departamento de Salud se impulsen contactos con los colectivos de mujeres lesbianas con el objetivo de analizar conjuntamente los diversos aspectos relacionados con esta prestación.
El Síndic considera que es imprescindible acabar tanto con la situación de incertidumbre en que se encuentran actualmente las mujeres lesbianas catalanas respecto a las condiciones de acceso a las técnicas de reproducción asistida como con la discriminación que es produce a día de hoy cuando, en función del centro a que son derivadas pueden acceder o no a la prestación con cargo a la sanidad pública.