El 10 de diciembre se celebra el Día Internacional de los Derechos Humanos para conmemorar que la Asamblea General de la ONU aprobó, el 10 de diciembre de 1948, la Declaración Universal de Derechos Humanos.
La Declaración y los tratados internacionales que la desarrollan continúan siendo una norma plenamente vigente, pero tanto a escala internacional, como en Cataluña, todavía es habitual el grave incumplimiento de sus preceptos.
Las regresiones en el ámbito de los derechos sociales (salud, educación, trabajo, vivienda) provocadas por las denominadas políticas de austeridad son violaciones de derechos humanos en tanto que vulneran el principio de igualdad de oportunidades y son generadoras de pobreza y discriminación. También lo son las limitaciones en la libertad de expresión y manifestación con motivo de estos recortes.
Existen colectivos, como las mujeres, los niños, las personas LGBTI o las personas con dependencia, que son especialmente vulnerables a las conculcaciones de derechos. Es preciso promover y defender específicamente sus derechos.
También es particularmente necesario en este contexto combatir los brotes y las políticas xenófobas derivadas de los fenómenos de las migraciones y del refugio, causados por las violaciones masivas de los derechos humanos, el empobrecimiento de las sociedades y las catástrofes ambientales, como el cambio climático.
El horizonte de una sociedad democrática, transparente y que libremente pueda decidir su futuro es el objetivo de la Declaración Universal. El Síndic de Greuges trabaja para garantizar todos los derechos humanos para todas las personas sin distinción.