Se ha recibido una queja sobre la falta de transparencia y difusión en el procedimiento
Denuncian que tendrá un impacto inmobiliario y ecológico y que no responde a necesidades reales
El Síndic de Greuges de Cataluña ha pedido al Departamento de Territorio y Sostenibilidad que retire la aprobación definitiva del Plan director urbanístico aeroportuario de la Cerdaña del orden del día de la Comisión de Política Territorial y de Urbanismo de Cataluña, prevista para el martes 5 de abril.
El Síndic se ha hecho eco de las voces contrarias al Plan y, antes de que se apruebe definitivamente, ha solicitado información sobre las características y los posibles efectos ambientales y urbanísticos que puede comportar. Además, ha reclamado al Departamento que responda a las alegaciones formuladas por los ayuntamientos directamente afectados, Das y Fontanals. Ambos consistorios se han dirigido al Síndic para pedirle que intervenga y detenga la aprobación del Plan.
El Síndic también ha recibido una queja en la que se denuncia una posible falta de transparencia y difusión en el procedimiento. En primer lugar, porque el trámite de información pública se llevó a cabo durante el mes de agosto, mes en que es fácil que pase inadvertido para los posibles interesados. En segundo lugar, porque el 14 de enero de 2016 la Dirección General de Transportes y Movilidad denegó a un interesado el acceso al expediente. El Síndic ya ha pedido explicaciones sobre estos hechos.
Las alegaciones al Plan se centran, entre otras, en el hecho de que este tendrá un impacto negativo desde el punto de vista inmobiliario y ecológico cuando no responde a necesidades reales de la comarca. El Plan afecta a terrenos incluidos en el espacio NATURA 2000 y, además, se fundamenta en el Plan territorial de aeropuertos de Cataluña 2009-2015, que el TSJC declaró nulo el 15 de septiembre de 2014, y en el Plan director del aeródromo de la Cerdanya, cuya tramitación no se completó y, por tanto, no está vigente.
Los promotores de la queja afirman que el Plan abría la puerta a la circulación de aviones privados de hasta 24 metros. Actualmente, las instalaciones tienen limitada su actividad a vuelos deportivos, globos aerostáticos y helicópteros de rescate.