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El Síndic abre el debate parlamentario sobre el uso de las pistolas eléctricas y recomienda criterios comunes para todos los cuerpos policiales

13/04/2016

El Comité Europeo para la Prevención de la Tortura (CPT) muestra su preocupación por el uso abusivo que se pueda hacer de las pistolas Taser

Antes del informe del Síndic se desconocía el número de policías locales que disponen de estas armas y de las que se han empleado, y no se prevé ningún control

Según los datos del Síndic, de los 213 cuerpos de policía local de todo Cataluña, 31 disponen de una pistola o más. En total, hay 54

No deben ser utilizadas, en ningún caso, contra personas vulnerables

El síndic de greuges ha presentado este miércoles 13 de abril el informe monográfico sobre la dotación de pistolas eléctricas por parte de los cuerpos policiales catalanes ante el Grupo de Trabajo del Parlamento sobre la Utilización por la Policía de Pistolas Eléctricas. La intervención del síndic, Rafael Ribó, ha abierto el debate parlamentario, previo a una eventual autorización.

Este debate, que ha sido una de las recomendaciones más insistentes del Síndic respecto a las pistolas eléctricas, deberá determinar si la dotación de este armamento se adecua al nuevo modelo de seguridad pública que se quiere para Cataluña.

En su comparecencia, el síndic ha subrayado la posición del Comité Europeu para la Prevención de la Tortura y otras Penas o Tratos Inhumanos o Degradantes del Consejo de Europa (CPT), que muestra preocupación por el uso abusivo que se pueda hacer de las pistolas Taser. Teme que, por el hecho de que no son armas letales, se apriete el gatillo con más facilidad que con las pistolas tradicionales. Por este motivo, ha elaborado unos estándares dirigidos a los miembros del Consejo de Europa.

El  Síndic ha alertado de que el Gobierno catalán desconoce el número de policías locales que disponen y hacen uso de las pistolas eléctricas y tampoco ha adoptado ninguna medida para garantirzar su control desde una perspectiva de derechos humanos. Ha sido el Síndic, en el marco de este informe, quien ha recopilado las datos y ha extraído una relación actualizada.

Según estos datos, del total de 213 cuerpos de policía local de toda Cataluña, 31 disponen, como dotación oficial, de una pistola eléctrica o más. De estos, sólo 21 las tienen en servicio, y hay 6 más en perspectiva. En total, hay 54 pistolas, que sólo 5 policías locales han utilizado en una o dos ocasiones. Sorprende que municipios pequeños, con una población inferior a los 20.000 habitantes (en algunos casos, bastantes menos), sean precisamente los que disponen de tres y cuatro pistolas. Este sería el caso de Dosrius, Vilanova del Vallès, Llinars del Vallès, Sant Pol de Mar, Sant Antoni de Vilamajor y Caldes d'Estrac.

Los protocolos de actuación de los que disponen las policías locales (22) son prácticamente idénticos y su contenido coincide con el temario de la formación que han recibido por parte de la empresa Taser.

El Síndic considera que si el Parlamento avalara el uso de estas armas, la Policía de la Generalitat y las policías locales se deberían dotar de una regulación con unas directivas comunes, de acuerdo con las recomendaciones formuladas por organismos internacionales.

Así, sería necesario que los criterios para la utilización de este tipo de armas se establecieran por ley y que se controlara su uso mediante un protocolo común para todos los cuerpos policiales. El uso y el protocolo definido deben supeditarse a los principios de necesidad y de proporcionalidad, según los cuales sólo deben ser empleadas dichas armas en situaciones extremas y bien definidas, cuando exista una amenaza real e inminente para la integridad física o la vida de las personas.

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