Como presidente del IOI Europa, ha solicitado información al Ombudsman de Turquía y le ha ofrecido su apoyo y colaboración
El síndic de greuges de Cataluña, Rafael Ribó, en calidad de presidente del capítulo europeo del Instituto Internacional del Ombudsman (IOI) se ha dirigido al Ombudsman de Turquía y le ha ofrecido su apoyo a la vista de la convulsa situación que vive su país.
Ribó considera muy grave la reciente derogación del Convenio europeo de derechos humanos en Turquía como consecuencia de la declaración del estado de emergencia por parte del Consejo de Ministros turco, el pasado 20 de julio. Consciente de que la función de los ombudsman es garantizar el respeto a los derechos humanos, el síndic cuestiona que un golpe de estado fallido constituya una “emergencia pública que amenace la pervivencia de la nación” en los términos del artículo 15 del Convenio europeo. Ha puesto como ejemplo el precedente establecido por la Comisión Europea de Derechos Humanos en su informe sobre el golpe de estado griego de 1967.
Así, ha preguntado a su homólogo turco si realmente las medidas adoptadas por el Gobierno del país, por las cuales se derogan sus obligaciones en lo que respecta al cumplimiento del Convenio, se están activando “sólo hasta el punto estricto en que lo requieran las exigencias de la situación”. También ha solicitado información sobre la veracidad de las noticias publicadas y si algunas de estas medidas, como la expulsión masiva de centenares de miembros de la judicatura, pueden ser desproporcionadas y coartar el derecho a un juicio justo. Así mismo, las limitaciones a la privacidad (art. 6), a la libertad de expresión y de información (art. 9 y 10) o a la libre circulación de personas (protocolo 4) se deberían adoptar de manera individual, y sólo en caso de estar estrictamente justificadas por las exigencias de la situación.
Finalmente, el Síndic ha pedido información sobre posibles vulneraciones de derechos que, de acuerdo con el Convenio, no se pueden derogar bajo ninguna circunstancia, como la prohibición de la tortura. En cuanto a las declaraciones del presidente Erdogan, que ha anunciado una posible reinstauración de la pena de muerte, Ribó destaca que sería una medida incompatible con los protocolos 6 y 13, que se incluyen entre aquellos que no se pueden derogar bajo circunstancia alguna.