Los miembros de la sección europea del IOI, que preside el síndic, Rafael Ribó adoptan la Declaración de Barcelona en el marco del seminario sobre derechos humanos
Defienden la necesidad de cooperar en red para hacer frente a los retos comunes de defensa de los derechos y libertades, particularmente para proteger los derechos de las personas migrantes y refugiadas
En el marco de la clausura el presidente de la Generalitat ha avanzado el encargo que realizará al Síndic de Greuges de liderar un plan nacional de derechos humanos
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha dado por finalizado este martes 4 de abril el segundo seminario internacional organizado por el Síndic para abordar los retos de los derechos humanos en Europa. El evento, que ha reunido una cuarentena de ombudsman de toda Europa, ha culminado con la ratificación de la Declaración de Barcelona. Dicho documento, aprobado por los miembros de la sección europea del Instituto Internacional del Ombudsman, presidida por el síndic, Rafael Ribó, denuncia las restricciones a los derechos humanos y las libertades fundamentales que se producen en algunos países europeos basadas en amenazas a la seguridad y al orden público.
En esta declaración los ombudsman también se comprometen a promover y defender los derechos humanos y las libertades fundamentales, tanto económicos y sociales como civiles y políticos. Además, exigen a los estados de la Unión Europea que cumplan plenamente sus deberes internacionales en materia de derechos humanos y supriman los estados de excepción y las suspensiones del Convenio europeo ahí donde estas limitaciones no sean absolutamente imprescindibles.
Exigen también a los estados europeos la acogida de personas migrantes y refugiadas, en cumplimiento de la propuesta de la Comisión Europea de septiembre de 2015, y que éstas sean tratadas de acuerdo con los estándares y los tratados internacionales y europeos de derechos humanos, con una atención especial a los derechos y al interés superior de los niños
En la segunda jornada del seminario han participado como ponentes, entre otros, la defensora de la UE, Emily O’Reilly, que ha destacado el impacto de los ombudsman en la defensa de derechos más allá de la investigación de quejas particulares.
El ombudsman de Turquía, Seref Malkoç, ha abordado el tema del terrorismo y ha puesto de manifiesto que los ombudsman de Europa no pueden solucionar la crisis de los refugiados y de la migración en general sin el trabajo en red con los ombudsman del resto del mundo, principalmente de los países de origen de las personas migrantes.
La defensora del pueblo, Soledad Becerril, ha hecho público el llamamiento a favor de la paz y ha puesto sobre la mesa la necesidad de finalizar la guerra en Siria.
La Declaración de los defensores autonómicos de febrero de 2017, mediante el cual instan el gobierno español a ampliar lo acogida de refugiados, ha sido el eje del discurso del ararteko, Manuel Lezertua. Por su parte, el ombudsman griego, Andreas Potakkis, ha abordado la percepción de Grecia como un lugar de tránsito para los refugiados y el impacto que tiene en sus derechos esta situación de emergencia.
El síndic, Rafael Ribó, ha defendido la necesidad de las instituciones de ombudsman de cooperar en red a nivel europeo y mundial para hacer frente a los retos comunes de defensa de los derechos y libertades, particularmente para proteger los derechos de las personas migrantes y refugiadas en sus países de origen, tránsito y destino.
Este es uno de los compromisos incluidos en la Declaración de Barcelona, que ha presentado el adjunto general al Síndic, Jaume Saura.
El Síndic liderará un plan nacional de derechos humanos en Cataluña
En el marco de este seminario, el presidente de la Generalitat ha avanzado el encargo que se realizará al Síndic de Greuges de liderar un plan nacional de derechos humanos, de acuerdo con principios y requisitos internacionales, de cara a una proyección exterior de lo que se realice en Cataluña sobre derechos humanos.
La elección del Síndic para encabezar el proyecto viene motivada porque la institución dispone de las competencias y los medios suficientes para llevar a cabo esta misión, junto con la experiencia nacional e internacional. Con este objetivo, el Síndic trabajará conjuntamente con el Instituto de Derechos Humanos de Cataluña (IDHC), única entidad generalista en el ámbito de los derechos humanos en Cataluña que goza de estatus de observador en las Naciones Unidas. También se quiere abrir la participación a instituciones y entidades sociales que trabajan sobre la materia.
El Síndic, una vez estuviera constituido como la Estructura Nacional de Derechos Humanos (Endh), además de elaborar el plan, tendría las funciones de realizar su seguimiento y opinar sobre las propuestas de ley, emitir informes y colaborar con entidades del tercer sector, entre otras.