Noticias

El Síndic investiga de oficio la actuación de las administraciones ante la persistencia de la huelga de metro

Dada la duración de la huelga, el estancamiento en las negociaciones y el importante perjuicio que está ocasionando a los usuarios del metro, el Síndic de Greuges de Cataluña ha decidido intervenir en el conflicto laboral entre los trabajadores y la Dirección de los Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB).

El Síndic destaca que es preciso encontrar el equilibrio entre el ejercicio del derecho colectivo de huelga y los intereses del resto de la ciudadanía en general. Esto es particularmente importante cuando la huelga afecta a servicios públicos esenciales y tiene incidencia en los derechos fundamentales del resto de la sociedad.

La plantilla del Metro decidió hace unos meses en asamblea convocar paradas parciales durante todos el lunes laborables, en las franjas de hora punta, con el fin de poner de manifiesto el incumplimiento por parte de TMB de los compromisos adoptados como preacuerdo en el mes de julio de 2016. En este preacuerdo, según los sindicatos convocantes de la huelga, TMB se comprometía a realizar una subida salarial y a mejorar las condiciones laborales de los trabajadores.

Sin presuponer una mala praxis por parte de la Administración, pero con el objetivo de activar medidas conciliadoras, el Síndic se ha dirigido a TMB para conocer qué negociaciones han llevado a cabo las partes en conflicto y ha incidido en la necesidad de intensificar el ritmo de estas negociaciones. En este sentido ha sugerido a la entidad la posibilidad que esta solicite la emisión de un laudo de obligado cumplimiento, en forma de resolución de acuerdo vinculante para ambas partes.

También ha preguntado al Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias por el grado de cumplimiento de los servicios mínimos y por las medidas adoptadas para garantizar el cumplimiento y el seguimiento.

Actualmente hay unos servicios mínimos del 40% en las dos primeras franjas y de 20% en la última franja de las paradas parciales. Teniendo en cuenta que las 10 jornadas de huelga han afectado a más de un millón y medio de usuarios del metro, con el consecuente perjuicio económico, el Síndic ha recomendado al Departamento de Trabajo que valore la posibilidad de ampliar estos servicios mínimos y le ha pedido que se implique con más decisión en las negociaciones.

El Síndic considera sorprendente que diez semanas después de haber empezado las huelgas semanales, ni trabajadores ni dirección hayan avanzado en buscar soluciones. Por este motivo, y tras conocer que la última reunión ha dejado las negociaciones en un punto muerto y se han anunciado nuevas convocatorias de huelga, el Síndic ha decidido actuar de oficio. Además, pone el acento en la falta de información pública sobre el estado de las negociaciones y los motivos de la huelga.

Así, también se ha dirigido al Departamento de Territorio y Sostenibilidad, como máximo responsable de la movilidad en Cataluña, para saber qué gestiones ha hecho y piensa seguir haciendo para la resolución del conflicto. Y en esta misma línea, ha pedido información al Ayuntamiento de Barcelona.

Por último, el Síndic informa que desconoce si la asamblea de trabajadores se ha vuelto a reunir para valorar el estado de las negociaciones, cosa que a su juicio sería favorable para resolver el conflicto.

Volver