Hoy y mañana tienen lugar en Barcelona las Jornadas de Coordinación de Defensores del Pueblo sobre la protección de los niños en situación de riesgo o desamparo
Hoy han comenzado las XXXVI Jornadas de Coordinación de Defensores del Pueblo, celebradas en Barcelona, en el Palau Macaya, y organizadas por el Síndic de Greuges de Cataluña.
Con el título “Proteger a la infancia protegiendo sus derechos: un reto desde las defensorías”, este año las jornadas han abordado el tema del sistema actual de protección a la infancia y la adolescencia.
El punto de partida es el derecho del niño a vivir en un entorno familiar, por lo que la separación de la familia solo debe producirse como último recurso. Además, el interés superior del niño es el criterio que hay que seguir en cualquier decisión que pueda afectarle, y prevalece sobre cualquier otro interés legítimo que esté en juego, incluido el de los progenitores. También se ha manifestado la necesidad primordial de escuchar a los niños y de ponerlos en el centro durante todo el proceso de desamparo.
En este contexto, las instituciones de defensa de derechos deben velar por que las administraciones actúen de acuerdo con este principio y trabajen para reducir los factores de riesgo, de modo que los niños y adolescentes puedan seguir viviendo en su entorno familiar.
Las Jornadas han contado con la presencia del consejero de Derechos Sociales, Carles Campuzano, que ha acompañado a la síndica, Esther Giménez-Salinas, y al defensor del pueblo de España, Ángel Gabilondo, durante la inauguración. Campuzano ha subrayado que a menudo las situaciones de desprotección están relacionadas con la pobreza y, por tanto, es necesario invertir más en políticas de apoyo a las familias para evitar desamparos. También ha destacado el esfuerzo que está haciendo el Gobierno catalán para conseguir más familias acogedoras.
Ángel Gabilondo, por su parte, ha enfatizado el derecho de los niños a crecer en un entorno familiar: “Es un derecho inherente a su condición de persona, lo que nos obliga a replantearnos el sistema de protección actual.”
La introducción ha ido a cargo de la síndica, que ha hecho un recorrido histórico por el sistema de protección en Cataluña. Esther Giménez-Salinas ha explicado que España vivió un retraso histórico respecto al resto de Europa, que hace que el sistema de garantías en el procedimiento de desamparo aún no se haya desarrollado lo suficiente. Ha finalizado su intervención manifestando el reto que tenemos como sociedad de dar más apoyo a las familias, dotar de más garantías al conjunto del sistema y trabajar más la prevención con las familias en riesgo. Debemos evolucionar del “separar para proteger” hacia el “prevenir para proteger”.
La sesión también ha incluido una mesa redonda en la que representantes de las defensorías han expuesto los resultados del trabajo llevado a cabo en los talleres previos sobre la materia que tuvieron lugar en Sevilla. Han expuesto los principales problemas que detectaron las defensorías en relación con la infancia en riesgo, como la falta de homogeneidad y sistematización de los datos sobre los procesos de detección, la falta de medidas preventivas de intervención para favorecer la parentalidad positiva, la diversidad de regulaciones en relación con los procedimientos del sistema de protección entre las comunidades autónomas y la falta de coordinación interadministrativa en el marco de las intervenciones. También se han destacado algunas buenas prácticas de los sistemas de protección autonómicos.
En la sesión de hoy, el conjunto de defensores también ha aprobado la propuesta del Diputado del Común de Canarias de trabajar por una “acogida solidaria” entre todas las comunidades autónomas de los niños migrantes solos sin referentes que lleguen en territorio canario.
Durante la jornada, dos expertos de distintos ámbitos también han aportado su visión sobre la temática. Por un lado, María Salomé Adroher, desde una perspectiva más jurídica, ha hablado del difícil equilibrio entre el sistema de protección y los derechos de la infancia. Y por el otro, Jorge Barudy, desde la neurociencia, ha hablado de qué elementos son importantes para superar las experiencias adversas en la infancia.